Mientras más descubro cosas de Japón, más encantada me quedo con esta cultura; con su percepción de la belleza, la constancia para lograr las cosas que nos proponemos; aunque sea en un acto simple y cotidiano.
Y en ese descubrimiento, me acabo de enterar que esos muñequitos o animalitos tejidos en crochet, los "AMIGURUMIS" también provienen de Japón.
Y yo sin saberlo, cuando me enteré que estaba embarazada, tejí a Filomena la jirafa, mientras iba sintiendo mis primera emociones de ser mamá.
Después, me fanaticé y tejí un dinosaurio, y a oso "Meloso". Este último era el favorito de Guillo cuando nació, pero en su primer viaje a Chile lo perdimos...que tristeza!!!
Y a principios de este año, en invierno, que es cuando más me gusta tejer, hice a un amiguito nuevo, pero este es para mi, Federico, quien me cuida las llaves de casa.
Guillo los disfruta mucho y desde que perdimos a oso Meloso, Filomena ha ocupado el primer lugar de preferencia, aunque por tiempos le muestra atención también a su dinosaurio. Con Federico la relación es distinta, no juegan, pero si pasean juntos cuando vamos al negocio a comprar el pan o el agua mineral.
¡Qué bonitos amiguitos podemos invitar a nuestras casas con tan solo un crochet, lana o hilo y la imaginación!
Como se nota que Guillo juega con sus muñecos de crochet, y qué mejores juguetes puede tener que los tejidos por su mamá.
ResponderEliminarComo ya sabes me encanta el crochet japonés, y al igual que a tí me llama mucho la atención la cultura japonesa.
Ya estoy de vuelta.
Besos.
Qué bueno que estas de vuelta!
EliminarLa cultura japonesa es realmente fascinante! su cosmovisión, la disciplina, todo se ve reflejado en su arte.Te dejo un abrazo!