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| Mi papá y sus pasos |
Cuando era muy pequeña, creía que era el más lindo de todos los hombres. Yo esperaba todas las tardes que llegara del trabajo, me dijera "Cierra los ojos" y me sorprendiera con unos chocolatitos cuadrados que cuando él los daba sabían más ricos.Crecimos los dos; yo como hija, él como padre; pero el tránsito no siempre fue fácil; más bien tuvimos baches, champas de pasto húmedo entre junio y julio y reseco en enero.Varias veces nos encrespamos igual que el gato grande que vivió en la casa muchos años, mostramos los dientes como el Dinki cuando nos sentíamos agraviados uno del otro, guardamos silencio, y paramos.Ahora yo mamá y lejos, él con pasos lentos y medio frágil. Serán los años que carga mi cuerpo, la distancia, la propia vida, no sé, pero es bueno sentirme en paz, queriéndolo, extrañándolo y enterneciéndome, como si fuera él quien me espera que llegue con chocolatitos blandos y pequeños para disfrutar juntos.
¡Feliz día a mi papá, al papá de Guillo y a los papás suyos!
Qué bello! Me he sentido muy identificada. Con mi papi de niña esperaba cositas de papelería que siempre me traía: sacapuntas, gomas de borrar, lapiceros especiales, libretas monas. Siempre, cada viernes me traía algo precioso y su sonrisa bondadosa. Después, como tú, tuvimos muchos baches y otros tantos acercamientos. Ahora tan viejito, con casi 90 años siento que no le he dicho lo maravilloso que ha sido, a pesar de todo, y que no quiero perderle sin decírselo. Mi propio marido a menudo me ha dicho que lo quiere como si fuera su propio padre!
ResponderEliminarBonita entrada!! Leeré las demás. No he podido venir antes, pues precisamente mis padres se han cambiado de casa y no hemos parado.
Besos y te deseo un buen domingo. Quizás con un buen libro o un paseo tras los pasos de tu papi querido.
Ana.
Muchas gracias por tu comentario! la vida nos va cambiando y en algunas cosas es bueno. Ana yo he extrañado tus entradas, pero claro, a veces no se puede escribir tan seguido...Espero que tengas una linda semana y que disfrutes de tu Goya, que por cierto me has hecho comprenderlo mejor. Un abrazo!
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