Me gusta prestar
atención a los pequeños detalles; los que arriesgan pasar desapercibidos y
olvidados.
En una casa por ejemplo, me gusta fijar mi
atención en los rincones y ver más allá del polvo acumulado o una telaraña
rota.
Para mi cada rincón es un contenedor de
símbolos. Y por eso me gusta cuidar de ellos con preciado cariño.
Hay rincones que hablan de la rudeza, del frío,
la soledad o la felicidad también. Cuentan sobre quienes los habitan y quienes
no.
Un rincón y sus
detalles es una breve historia, a veces compleja, a veces no tanto.
No quería dejar que se pase diciembre sin comunicarme con ustedes.
Muchas gracias, siempre, por la compañía).
En las pequeñas cosas está siempre lo más importante. Felices Fiestas, Yeka. Un abrazo.
ResponderEliminar¡Gracias Blue, igualmente para ti!
ResponderEliminarLo grande de las pequenias cosas... un abrazo
ResponderEliminar¡Saludos Stella!
EliminarLa tetera de bronce me tiene hechizado. Me recuerda a mundos de cuento y charlas junto al brasero, las cosas inmejorables de La Vida son tomar té en buena compañía y ficcionar, escribir, sonetizar, dibujar.
ResponderEliminar¡Y saludarte!
Atentamente,
M o n s ú.
¡Muchas gracias por los saludos Monsú!¡Igualmente saludos para ti!
EliminarOla Yeka, passando para ver as novidades.
ResponderEliminarAbraços.
Me he tardado con las novedades, ¡pero es tan grato leer los saludos!
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